El fortalecer las competencias y las habilidades sociales de los profesionales del futuro
Las calificaciones y habilidades exigidas a los profesionales en un mercado de trabajo en constante evolución son cada vez mayores y van más allá del lado técnico, también por la conducta. Por eso, la formación integral de los futuros profesionales del siglo XXI orienta profundamente a las discusiones de los educadores de hoy. Con un mercado cada vez más volátil, en el cual la adaptación de nuevas tecnologías cambia rápidamente la demanda por algunos tipos de trabajo y que también crea nuevos modelos de empleo, es necesario que el sistema de educación también se adapte para preparar a las futuras generaciones en este nuevo ambiente profesional.
De acuerdo con la Investigación del Futuro de los Empleos del Foro Económico Mundial, “una amplia gama de ocupaciones exigirá diferentes habilidades cognitivas –como creatividad, raciocinio lógico y resolución de problemas– como parte de su conjunto de habilidades básicas”. En este contexto, la forma de enseñar Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas (conocidas como STEM, por sus siglas en inglés), junto con el desarrollo de las calificaciones socioemocionales, es una vía interesante para favorecer la habilidad de resolución de problemas y el dominio de las propias emociones, preparando a niños y a jóvenes para encarar los desafíos y adversidades del día a día.
Ante este contexto, es cada vez más importante una educación que alinee el conocimiento técnico a los 4Cs de la Comunicación, designados por la National Education Association (NEA) como sentido esencial para la Educación Básica, y que consta en: pensamiento crítico (critical thinking), colaboración (collaboration), comunicación (communication) y creatividad (creativity). Reforzar estas competencias es esencial para formar ciudadanos más preparados para los desafíos del futuro.
Vale destacar que este desafío de formar a los profesionales del futuro va mucho más allá de la actualización del currículum escolar. También debe estimular la creación de nuevos procesos educativos y de aprendizaje, pasando por el refuerzo en la formación de profesores para fomentar esas ideas. Un proceso complejo que traerá resultados a mediano y largo plazo.
Samsung se mueve en ese sentido para promover resultados a la altura de este gran desafío, operando diversos programas educacionales para crear experiencias de aprendizaje más inclusivas y de calidad para los jóvenes; todo con el fin de capacitar a las futuras generaciones para que puedan llegar a su máximo potencial. El programa Solve For Tomorrow, presente en 17 países de América Latina, busca desarrollar el potencial de los alumnos de las escuelas públicas por medio del abordaje STEM para que implementen cambios sociales significativos en sus comunidades, teniendo a la tecnología como herramienta de transformación. Desde el 2014, solo por medio de este programa, impactamos a más de 222 mil alumnos y 31 mil profesores de 16 países de la región.
Con las habilidades sociales y técnicas bien desarrolladas, esperamos que estos jóvenes sean los creadores de soluciones que traerán más y diferentes oportunidades de desarrollo para las próximas generaciones. ¡Apostemos a eso!
*9 de cada 10 profesionales son contratados por el perfil técnico y despedidos por la conducta
*Las grandes empresas despiden por problemas de conducta
*People are Hired for their Skills and Fired for their Behaviour
*Hard skills get you hired, poor soft skills could get you fired
via Samsung News.
